LA HISTORIA DETRÁS DE A SU IMAGEN

A su Imagen no comenzó como un simple negocio de camisetas. Inició como una pasión por expresar mi fe de manera creativa y hacer que otras personas pudieran llevar consigo un mensaje poderoso a través de lo que vestían. Fue una visión que me tomó tiempo desarrollar, pero sentí la necesidad de hacerlo tangible, de ofrecer algo más que un producto: quería que cada camiseta y cada diseño contara una historia de fe.

Como todo inicio, no fue fácil. Había momentos en los que me preguntaba si valdría la pena, si las personas realmente verían el valor de las prendas y diseños que ofrecía. La incertidumbre era constante, pero también me aferré a la promesa de que todo lo que se hace con amor y propósito tiene un impacto más grande de lo que imaginamos.

Poco a poco, A su Imagen fue creciendo, y lo que empezó como una pequeña idea se convirtió en algo mucho más grande. Ver cómo las personas se conectaban con los mensajes detrás de cada diseño me confirmó que Dios estaba usando esta plataforma para algo mayor. Cada testimonio y cada pedido son un recordatorio de que este es un espacio donde la creatividad y la fe se encuentran, y eso es lo que más me inspira a seguir. Sin dejar a un lado, el que Dios respondió a un anhelo de mi corazón. Recibir una confirmación clara y contundente de que lo que estaba haciendo, provenía de Él. Y así fue, Él, con palabras específicas, se encargó de que mi corazón sintiera paz. Sus palabras por medio de un hombre de Dios fueron: "Yo fui quien puso ese sueño en tu corazón. Antes de que estuviera en el tuyo, nació en el mío".

A su Imagen no es sólo un negocio; es un movimiento. Mi mayor esperanza es que esta plataforma continúe expandiéndose, alcanzando corazones y recordando a cada persona que, sin importar las circunstancias, fueron creados con un propósito. Cada prenda es una oportunidad para recordar que Dios está en los detalles, y que nuestra vida puede ser una expresión viva de su amor. Sumado a la esperanza de que en algún momento, parte de las ganancias de este emprendimiento, vayan destinadas a ayudar a los más necesitados. 

Estoy emocionada de ver hacia dónde nos llevará Dios en los próximos pasos de esta travesía. Y lo mejor de todo es que no lo hago sola: cada uno de ustedes forma parte de esta historia. Agradezco profundamente el apoyo y el amor que han demostrado a A su Imagen. Juntos, sigamos reflejando la imagen de Dios en todo lo que hacemos.

Con cariño,

Gabriela <3